En este video aprenderás a personalizar una puerta.
Siempre es posible decorar una puerta, independientemente de su forma o el material del que esté hecha.
Para hacerlo podrás expresar tu creatividad de muchas maneras: pintando, tapizando, fijando espejos, o incluso utilizando plantillas, pegatinas, o molduras.
En este caso, vamos a decorar nuestra puerta con molduras y a continuación la pintaremos.
Esto le dará un aspecto ligeramente clásico y auténtico.
Para llevar a cabo este trabajo utilizaremos un kit de molduras ya recortadas y adaptadas al tamaño de la puerta. Este kit tiene varias ventajas: es barato y los cortes de los ángulos de las molduras ya están hechos. No necesitarás ajustarlos con una sierra ingletadora.
Para empezar, desmonta la puerta y túmbala, que quede bien estable. Después, desatornilla los 2 tornillos del picaporte y sácalo.
Ahora puedes comenzar a medir y a hacer los trazos
Guiándote por el esquema incluido en el kit, mide y traza las líneas de referencia. Es preferible utilizar una regla para que las medidas sean más precisas. Además, te resultará más sencillo. Utiliza la regla o un codal, y traza las líneas con lápiz.
Una vez que tengas las líneas, a manera de prueba y para hacernos una idea del resultado, coloca las molduras. Alínealas con el centro de la puerta y respeta bien los ángulos de cada marco.
A continuación, clávalas. Para hacerlo utiliza clavos para madera. Si es posible, manipúlalos con un sujetaclavos imantado. Utiliza 2 clavos en cada lado de las molduras. Colócalos y clava con un martillo.
Utiliza un martillo pequeño, adecuado para este trabajo. Puedes clavar con la parte más fina del martillo para no estropear las molduras.
Añade un tercer clavo en el centro de cada moldura.
Asegúrate de que todas las molduras estén bien fijas.
Ya puedes preparar tu puerta para pintarla.
Empieza por limpiarla bien y quitarle el polvo con un paño seco.
Ahora puedes aplicar la primera capa de pintura. Mézclala para que sea homogénea. Aplica la primera capa con el rodillo adecuado. En esta primera mano, haz franjas regulares que cubran bien las molduras.
Cuando hayas terminado con la primera capa, déjala secar al menos 24 horas.
Antes de pintar de nuevo, pule la primera capa con una esponja abrasiva para eliminar residuos. debe quedar lisa. La ventaja de utilizar una esponja abrasiva es que se adaptará a los relieves de las molduras.
Cuando la superficie de la puerta quede perfectamente lisa, estará lista para la segunda capa de pintura.
Pinta con el rodillo haciendo especial énfasis en las molduras.
Déjala secar al menos 24 horas.
Ahora puedes aplicar una segunda capa de pintura. Repite el proceso.
Cuando la pintura esté seca, vuelve a colocar el picaporte y monta la puerta.
¡Ya está! ¡Has terminado de personalizar tu puerta!.
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